Michelle Arnal - Hay actitud

Inicios:
Empecé obligada hace mucho, chucho. Tenía cinco años. Ahora tengo treinta y tres.  Algo así como veintiocho años atrás.
Junto a mi hermana melliza nos dijeron que eligiéramos un deporte de grupo, en el club Univ. de La Plata. Grandes opciones para elegir no había (Risas).
A los quince años empecé a jugar en primera, hasta que me lesione la rodilla. Di vueltas por todos los médicos habidos y por haber, pero ninguno la pegaba con el diagnóstico. Hasta que apareció una eminencia  que dijo: “Ruptura de cruzados”. Y por esa razón estuve un año y medio fuera de las canchas.

Debe haber sido por exceso de habilidad, no?
Aunque no lo creas, sí. (Risas)
Fue en un partido contra Pucará queriéndome pasar a Sofía Mackenzie.  La dejé pagando,  pero con la gambeta se me fue la rodilla.

Pero la dejaste pagando!
Obvio! Me valió una rodilla, pero que importa. (Risas)
Después volví a jugar en primera, ascendimos de la C a la A (ruptura de ligamento interno y yeso mediante), dejé a los veintinueve, descansé un año, extrañé mucho, volví, me enfermé al tercer frío de ese invierno, reflexioné, me di cuenta que ya estaba grande y, desde ese momento, abandoné el  mundo federado.

Después de ese año sabático, tu retorno debe haber generado revuelo.
Lo hice acompañada de Marina. El comentario general era: “Volvieron las viejas cho” (Risas).
Ese año le pusimos mucha garra, pero con eso no alcanzaba y nosotras ya nos sentíamos en otro lado.
Ni bien dejé de jugar, tuve a mi hijo Tomás con Andrés (Mi marido) a quien  conocí en el club, ya que él jugaba al Rugby para U. de La Plata.
Igual, como el embarazo me fue eterno y extrañaba mucho correr y jugar al hockey, surgió la idea de Lica, con el formato que estábamos buscando: No entrenar más, jugar un fin de semana y que los partidos sean cortitos.

(Cuando hablo en plural, lo hago incluyendo a mi hermana melliza, porque la mayoría de las cosas las hicimos y las hacemos juntas).

En Hay Actitud, parecieran conocerse desde hace mucho. Es así?
Si, jugamos juntas desde novena, y dejamos de jugar casi al mismo tiempo.
Ya a los veintiocho años empezamos tener conversaciones estilo: “en algún momento vamos a tener que dejar de jugar, no?” y desde ahí empezaron a dejar casi todas.
Es que el vieja “cho” suena  divertido pero … (Risas).

Tanto vos como tus hermanas jugaron en Alemania, no?
Si. Pero éramos muy chiquitas.
Mi papá fue a trabajar allá, y con él nos fuimos todos. Jugábamos en el Bayer Leverkusen.
Mi hermana Mariana, lo disfrutó mucho más porque ella ya estaba atajando en el  seleccionado  y medio que era como la estrella del equipo. Aparte ya en ese entonces todos los jugadores de los planteles superiores eran rentados. 

Aprendiste algo de Alemán?
Siiiii. Llegué a hablarlo mejor que el castellano. (Risas)
El tema es que es un idioma muy complicado. En donde dejaste de practicarlo, se te fue. Hoy por hoy, si lo escucho lo entiendo, pero hablarlo me cuesta.

La noticia de que se iban a vivir a Alemania por unos años, fue algo así como la publicidad en la que el padre sienta a todos en la mesa y les dice…?
Nooooo. (Risas)
Nosotras no teníamos ni voz ni voto. Aparte para nosotras siempre fueron vacaciones. En todas las fotos estamos con cara de EHHHHH!!! (Risas).
En cambio a Mariana y a Pablo, el tema les gusto por la mitad,  porque ellos tenían diecisiete y dieciocho años.  Mariana lo que menos quería, era irse.
Pero después volvieron y todo siguió igual. Ella siguió en el seleccionado, hasta los Juegos Olímpicos Atlanta  96, mi hermano siguió con su vida…

Alguno de ustedes volvió a visitar Alemania?
Nosotras no. Mi hermano sí lo hizo por trabajo.

De tus tres hermanos, una es tu melliza y no se parecen en nada. Quién salió a quién?
Yo siempre fui el repollito y ella el espárrago. (Risas)
Ella salió a mi papá que mide 2.05 metros,  y que obviamente,  era jugador de básquet.
Yo en cambio fui más por el lado de mi mamá.

Me imagino que tu papá debe haber sido el mentor de la vida deportiva y tu mamá la que equilibró la balanza. Me equivoco?
Sí. (Risas).
En mi familia es todo una gran mezcolanza.  Mi papá,  aparte de jugar al Básquet,  es astrónomo y mi mamá, tenista y traductora de francés. Pablo es químico  y nosotras tres zoólogas orientadas cada una hacia diferentes caminos: mi melliza Natalí se dedica a la biología molecular, yo me orienté hacia el lado de la paleontología,  y Mariana, que es la única que no quiso hacer investigación, tiene una empresa de seguridad e higiene junto a su marido.
En mi casa, una charla de domingo puede terminar en cualquier cosa. (Risas)

Trabajás con dinosaurios?
Con animales fósiles. Trabajo con un grupo de mamíferos roedores  que vivieron acá hace millones de años cuando Sudamérica era un continente isla.

Esto tiene algo que ver con Pangea y Panthalassa, separada por el mar de Tetis?
(Risas) Naaada que ver!!!
Y Pangea No! Laurasia y Gondwana. No tengo idea que es Panthalassa (Risas).

Me parece que me estafaron en segundo año.
Creo que sí. (Risas)

Pero había un mar de Tetis, no?
Si. (Risas)
Bueno, volviendo al tema, como Sudamérica estaba aislada, la evolución de sus mamíferos era muy particular. Y dentro de ese grupo, yo estudio a los roedores.

Lugar de trabajo?
El campo de excavación está en la Patagonia  y se suele trabajarse acorde a la temperatura, empezando en octubre para terminar a fines de Marzo. En invierno te morías de frío. Se torna todo casi imposible.

Hay un eslabón de esta cadena hiper compleja que me está faltando. Tu marido.
Se dedica a un rubro distinto, pero algo ligado a todo mi entorno. El es economista y en estos momentos se encuentra llevando las finanzas de un instituto del CONICET.

Él sigue jugando al Rugby?
Si, retomó pero muy light. También sufre el frío. (Risas)

En el rubro investigación es común encontrarse con personalidades como las de ustedes?
No! Es más, a mi me preguntan y me repreguntan si de verdad soy paleontóloga.
El año pasado se hicieron las olimpiadas del CONICET, y formamos un equipo llamado “Las Paliohocketas”. Salimos campeonas entre tres equipos. (Risas).
Pero lo cómico fue que por el simple hecho de ser deportista de toda la vida, podría haberme anotado en todas las disciplinas y por vergüenza no lo hice. Sólo me animé de caradura al Ping Pong, y terminé con medalla de bronce. (Risas)
En las próximas me voy a anotar en todo.

Igual los paleontólogos somos un poco distintos al resto, porque tenemos campo. En cambio los que permanecen en el laboratorio, por lógica suelen ser más sedentarios y concentrados. Mi hermana muchas veces se asombra porque duermo en carpa en el medio de la nada y puede que no me bañe por una semana.

Cómo es un campamento de excavación?
Es por lo que realmente vale la pena esta profesión. Uno se encuentra en la nada absoluta, sin comunicación, y sin construcciones por cientos de kilómetros. Pero la de ahora no me la preguntes porque es ultra secreta (Risas).

Cuándo vas a los campamentos sos de las que llevan su equipo de trabajo, o de las que son llevadas por otros?
Por ahora de la segunda clase. Sigo siendo una pichi. (Risas)
El sistema es super verticalista.

Tu líder debe ser algo así como Indina Jones, no?
En el campo todos nos vestimos como Indiana Jones, pero cuando encontramos algo, solemos gritarlo como si fuera un gol.  Obviamente siempre y cuando el hallazgo sea realmente importante. Hace poco hicimos uno de ese estilo que todavía no tiene nombre. Igual tenemos uno tentativo.

Lo eligen ustedes?
Sí, pero a continuación  le tenemos que agregar la denominación correspondiente, como por ejemplo mis o mus, en el caso de los roedores.
Eso sí, no se puede insultar a nadie, ni jugar con dobles sentidos, porque han existido casos en los que los nombres cargaban a otras personas, por semejanzas físicas a los animales. Cosas que sólo sabemos nosotros.

Podríamos seguir con esta nota encantadora por horas,  pero tengo que cerrarla.
Tu frase?
El descanso es tan importante como el trabajo. No me gusta el estrés.

Nota: Estanislao Chiara Vieyra

Colegio de Abogados 0 vs El rejunte 5
Luego de recibir un contundente 4 a 0 en contra, efectuado por el poderío de las hermanas Arnal, El Rejunte necesitaba un partido con características especiales que le permitiera darle un giro distinto a un inicio de jornada, algo particular.

Por esta razón, enfrentarse a Colegio de Abogados y su carencia de arquera, les sentó como anillo al dedo.

Desde el arranque, el arco vacío pareció llamarlas cual encanto de sirenas, obteniendo en primera instancia la atención de Mercedes Rodríguez Peyloubet, su corrida y disparo algo desviado, para continuar segundos más tarde,  tras la salida de Colegio de Abogados, con la oportunidad de una nueva incursión, esta vez conjunta,  efectuada por María Pellita, María Eugenia Ferreira, Melisa Pereira y Barbará Ruiz, culminada en  el disparo de Melisa,  y ahora sí, el primer gol para su equipo.

A pesar de ello,  Belén Lopresti  (C. de Abogados), aprovechando la jugadora de más en cancha, se mostró confiada a la hora de distribuir el juego de su combinado,  empujando a Lucia Olmos y Gabriela Lara por banda derecha, en aproximaciones para nada desestimables.

Pero Teresa Alvares Garrido (El Rejunte) tenía una deuda consigo misma, gestada en el partido ante Hay Actitud, que debía desvanecer en lo inmediato. Fue por este motivo que apelando a su maravilloso salta pelotita de revés, dejó a medio equipo contrario en el camino para obtener un corto gol, con sabor a revancha, que ella misma definió de forma contundente.
Segundos después fue Mercedes Rodríguez Peyloubet, la que también  aprovecharía esta ausencia aumentando el tanteador un gol más ante la mirada analítica de Colegio de Abogados y el inevitable repliegue defensivo de Sandra Lizarazu, Vicky Mancini y Nati Russo.

Sin embargo el rejunte quería más.
Por este motivo Melisa Pereira volvió a decir presente en el marcador tras el pase de Barbará Ruiz, y Mercedes Rodríguez Peyloubet, de corto,  cerraría este marcador abultado, producto de una situación  tan extraña, que merece una revancha en lo inmediato.

De todas maneras, El Rejunte: Felicitaciones!

Nota: Estanislao Chiara Vieyra

Hay actitud 4 vs El Rejunte 0

El exceso de recursos de Hay Actitud, pudo con el juego equilibrado y conservador de El Rejunte, dentro de un partido plagado de situaciones peligrosas, ideales para aquellos equipos avocados a pulir su carácter defensivo.

De esta manera El Rejunte se vio expuesto  a una dura prueba,  donde el descuido exigió un completo reordenamiento sumado a una idea táctica precisa, de la cual extraer, al menos, una situación congeniada que las depositara del otro lado de la línea divisoria.

El equipo de Teresa Alvares Garrido, inició las acciones con una intensión precisa: Golpear con velocidad  en el marcador,  antes de recibir el peso de un apellido plagado de historia. Por este motivo, en compañía de Mercedes Rodriguez Peyloubet y Melisa Pereira (El Rejunte), Teresa sorprendió  a las vestidas de blanco, finalizando en la línea de fondo contraria, en lo que estadísticamente puede denominarse el primer ataque del partido.

Pero Natalí Arnal, no se  dejó amedrantar en absoluto por este inusual comienzo en contra, jugando rápidamente con su melliza Michelle,  por el centro de la cancha,  para que esta en centésimas de segundos y luego de dribliarese a casi todo el equipo contrario, culminara su avance con un tremendo impacto de revés, bien contenido por Fátima (El Rejunte), del cual Guillermina Masaferro y Laura Laguens (Hay Actitud), en compañía de la estrella de este partido, extraerían el primer corner corto, servido por Laura,  definido  por Michelle y despejado casi en la línea por Bárbara Ruiz  (El Rejunte), participe constante de un encuentro realmente agotador.

En poder de la bocha, Mercedes Rodríguez Peyloubet, con triangulaciones simples, algo más lentas que las de sus opuestas, intentó cargarse el equipo al hombro distribuyendo de izquierda a derecha, el propio  juego hacia  Guillermina Petiti y María Pellita (El Rejunte).
Sin embargo agazapadas en el bloqueo  Michelle, Rossi y Natalí, proseguían a la espera para brindarle el control de la esfera blanca a Guillermina Masaferro, proclamada por sus compañeras ama y señoras del centro estratégico de Hay Actitud.

Fue por una de estas intervenciones que luego de varios minutos de contundentes y apenas desviados ataques, Marianela Napolitano y Michelle Arnal, dieron una cátedra abierta de generosidad desmedida, evitando ejecutar el disparo final hacia la portería de Fátima, situación que de todas maneras finalizaría en el segundo corner corto para Hay Actitud, y gol de Michelle luego de una jugada que no necesito demasiada estructura.

De todas maneras, tan sólo treinta segundos más tarde, el verdadero Show, daría comienzo.
Michelle tras un  arresto solitario, volvería a decir presente mediante una jugada maravillosa que con un sutil toque de revés  ante la salida de la arquera, pondría la cosas dos por cero,  para simplemente ser observadora de la situación siguiente en la cual Guillermina Masaferro , desviaría el centro desde la derecha depositado  por Laura Laguens.

Pero este tres por cero a Hay Actitud, aún le sabía a poco.

Un disparo de revés por arriba del travesaño  de Guillermina Masaferro mediante, iniciaría una última incursión goleadoras en la cual Laura Laguens haría lo propio tras el pase de Mariela Napolitano al punto del penal, proveniente desde la banda derecha.

El ingreso de María Eugenia Ferreiro en El Rejunte, a partir del minuto doce, aportó aires renovadores a esta defensa colapsada, pero los 4 goles ya eran un hecho  difícilmente remontable.

Felicitaciones Hay Actitud por una increíble demostración de buen juego.

Nota: Estanislao Chiara Vieyra

Poligomas 6 vs Fincas de Iraola 0

El multicampeón Poligomas, leyenda viviente de Lica Capital y posible candidato a serlo, también,  en  Lica Sur, se vio más que sorprendido ante el intenso juego de Fincas, desconocido  hasta el momento por las ex Santa Bárbara.

Un comienzo algo inesperado para el equipo naranja, dotado por la circulación de pelota efectuada por Sofía Hebszevitsch, Florencia Perrela , Jessica Galván y Daniela Milachans , bastó para depositar a Fincas a las puertas  de su primer córner corto, servido por Jessica Galván, detenido por Macarena Gentileschi  y definido de revés apenas desviado,  por Sofía.

Pero Poligomas es Poligomas, y nada le sienta mejor a un equipo ofensivo, que un opuesto con similares características. Por esta razón, desde la óptica naranja,  todo era cuestión de tiempo.

Fue así como al minuto 4 y luego de un ataque gestado desde el palo de Sofía Hebszevitsch (Fincas), los espacios se abrieron lo suficiente para que la velocidad de Melina Majual por banda derecha habilitara a Grisel Valcarlos y un primer gol con estruendoso sonido de tabla favorable a las oriundas de La Plata.

Poco a poco Poligomas fue entendiendo la mecánica de Fincas, incorporando a la “hasta el momento” goleadora del partido, dentro de las triangulaciones de Sofía Hebszevitsch, Macarena Gentileschi y Jessica Glaván, para poder así comenzar a jugar más en el campo contrario que en el propio, sin depender tanto de los ataques de sus dotadas opuestas.
Pilar Gutiérrez Araujo (Poligomas), fue fundamental en esta nueva estrategia naranja,

sofocando los intentos de recuperación, una vez interceptada la bocha por Grisel Valcarlos. De este accionar conjunto, al minuto 7 Poligomas obtuvo un corner corto,  fallido en su desarrollo pero corregido con total soltura por Pilar, para establecer el dos a cero parcial, y el augurio de muchos más goles.

A pesar de esta contundente demostración de efectividad, Fincas siguió llevando a cabo su juego de la mano de Florencia Parrela (ejecutara de un disparo apenas desviado al minuto 8) y Macarena Gentileschi, quien también tuvo su chace al minuto 9, tras un revés potente, pero algo  fuera de línea.

Esta visión objetivada en la red contraria puede que le haya jugado en contra a Fincas,  a partir del minuto 10, llevando a todas sus jugadoras más allá de mitad de cancha,  sin contemplar la posibilidad de sufrir una contra bien al estilo Poligomas. 

Dicha realidad se hizo presente, un minuto más tarde poniendo en escena un inimaginado 4 vs 1, formado por Lucrecia Lievana, Grisel Valcarlos, Magdalena Franchesca y Pilar Gutiérrez Araujo, finalizado en el gol de esta última, más allá de la intensión defensiva de Daniela Milachan (Fincas), que realmente,  mucho no tenía para hacer.

De todas maneras, Fincas siguió con su plan de ataque y durante varios minutos logró revivir aquel inicio estremecedor que dejó perplejas a las multicampeonas de La Plata.
Disparo tras disparo, Josefina Mazzoleni, Macarena Gentileschi y Sofía Hebszevitsch amenazaron la valla de Paulina Albarracín (Poligomas), exigiendo los dotes de la arquera, a pesar de no obtener el resultado esperado.

Pero a Poligomas aún le quedaba un As bajo la manga: La Implacable “Cecilia Giuliani”.

A segundos de su ingreso,  esta jugadora ya se alzaba con un gol en su cuenta personal tras recibir el pase al espacio proveniente de  Magdalena Franchesca. Un minuto después, su instinto goleador la llevaría a interceptar una triangulación entre Florencia Parrela y Ludmila Hernández (Fincas), para decretar el 5 a 0, y a orillas del final, luego de recepcionar el “técnicamente perfecto” barrido amagado de Valentina Bonifacio, volvería a anotarse una nueva conquista personal,  para ahora sí,  colocar cifras definitivas a un partido distinto,  donde la lógica… quedó a un costado.

Poligomas Felicitaciones!

Nota: Estanislao Chiara Vieyra